Tenía altas expectativas de la crema porque se nota la calidad del empaque, es un frasco de vidrio pesado y con un branding muy clásico y elegante. En el empaque venía una espátula para que tomes el producto sin contaminarlo todo y la crema tiene una tapa interna para evitar que toque la tapa externa.
Dentro de lo más destacable, la crema tiene un olor tan rico que disfrute mucho al usarla. Tiene ese perfume de crema cara que puedes encontrar en una marca de super lujo, además una textura tan agradable que se funde muy bien en la piel. Es una crema densa, por lo tanto, yo la utilicé en invierno y me ayudó bastante a mantener bien hidratada y protegida la piel. Algo que me gusto mucho es que con poca cantidad te alcanzaba para toda la cara y no dejaba sensación grasosa, además que se absorbía bastante rápido.
En su lista de ingredientes destaca el extracto de nopal (si, así como leen), glicerina, una mezcla de esteres producto de la hidrogenación del aceite de oliva y esqualeno que sirven como emolientes entre otros extractos de plantas como shiso y salvia y cártamo. En general contiene extractos e ingredientes derivados de cactáceas, de ahí viene el nombre del secreto de Sahara, bastante acorde a mi parecer.
Desde mi perspectiva, es una formulación bien completa y que si no eres sensible a las fragancias ayudará mucho a restaurar la barrera de la piel. Se puede usar tanto de día como de noche, pero les recuerdo que es un poco densa y a pesar de que pueda absorberse rápido, puede no ser tan cómoda para el día sobre todo en pieles grasas.
